Reiki – Una Visión Personal

Hace algún tiempo una de las compañeras, Sol Dragón, colgó un artículo sobre Reiki (Reiki- ¿Qué es y cómo funciona el Reiki?). Hoy soy yo el que se ve impulsado a expresar mi particular opinión sobre el tema. Trataré igualmente de explicar, aunque de un modo más reflexivo, cómo funciona desde mi punto de vista y el por qué de su importancia y su gran valor.

En primer lugar, debemos tener presente que Reiki significa Energía Universal expresando, así, su nombre mismo su esencia. ¿Qué quiere decir esto? En un mundo en el que todos somos energía, vibrando a distintos niveles, Reiki es esa Energía Universal presente en todos y cada uno de nosotros, así como en todo cuanto existe. Por ello, pronto adivinamos que la afirmación tan usualmente empleada de “hacer Reiki” es una tontería pues ¿cómo vamos a hacer aquello que somos? ¿a alguien se le ocurriría decir “hago humano” en vez de “soy humano? Verdaderamente no, y nos reiríamos si alguien lo expresara en esos términos. Del mismo modo, resulta absurdo decir “hago Reiki” en lugar de “Soy Reiki”.

Ideograma del Reiki

¿Si todos “Somos Reiki”, por qué no todos podemos canalizar Reiki? Antes de desarrollar el tema, es necesario plantearnos esta pregunta de sencilla respuesta. Todos nosotros “Somos Reiki”, pero antes de poder canalizarlo libremente debemos equilibrarnos con él, adquirir un nivel de vibración que nos permita trabajarlo, regular nuestro cuerpo a todos los niveles para que sea capaz de hacerlo fluir. Para ello es necesaria la intervención de un Maestro de Reiki, quien posee las dotes y conocimientos para realizar la sintonización o “iniciación” de la persona; esto es de suma importancia, puesto que Reiki no puede ser canalizado por uno mismo sin la “activación” requerida. Usando una metáfora de mi propia maestra diré que es como si nosotros fuéramos un gran cable eléctrico por el que se puede canalizar gran cantidad de electricidad, pero nos hemos soltado del enchufe que nos la proporciona. Necesitamos pues, que venga alguien y nos vuelva a conectar a esa corriente para volverla a canalizar por nosotros mismos sin problema.

Antes de seguir, hay que decir que ha habido casos de iniciaciones espontáneas; aunque siempre en personas de alto nivel espiritual y en muy rara ocasión completa.

Una vez aclarado qué es el Reiki y que todos, absolutamente todos, podemos canalizarlo con la debida iniciación, la pregunta que nos surge es ¿Y qué beneficios puede suponer Reiki para mí, para qué iba a interesarme?

Los beneficios del Reiki son muchos, pero para entenderlos es mejor explicar las causas de los mismos más que enumerar una lista (nunca lo suficientemente larga o detallada). Así pues antes de ver los beneficios averigüemos por qué es beneficioso.

Como hemos dicho antes Reiki es Energía Universal, y nosotros mismos somos energía (energía que forma parte de esa Energía Universal). Bien, ¿cual es la diferencia entonces? La diferencia es el grado de vibración de las distintas energías. Nosotros, en el mundo material, nunca podremos llegar a vibrar a los niveles a los que lo hace Reiki, pero eso no significa que no podamos incrementar nuestros niveles vibratorios.

¿Qué conseguimos con esto? Al visitarnos con un terapeuta Reiki o al iniciarnos lo que hacemos es tomar contacto con una energía de vibración mayor a la nuestra. Ahora hagamos un ejercicio de física simple ¿qué sucede cuando tenemos un vaso de agua a 20º y otro a 80º? Que al mezclarse, la temperatura de ambos va a equilibrarse en un término medio; lo mismo sucede con el Reiki y nuestro nivel vibratorio.

Al elevar nuestras vibraciones veremos como todo nuestro ser empieza a notar mejorías. Al eliminar los posibles bloqueos energéticos que tengamos, o estancamientos, o carencias, todo nuestro ser empezará a encontrarse mejor. Pero no solo a nivel físico. Reiki, al elevar la vibración personal, afecta a todos los niveles: Físico, Emocional, Mental y Espiritual. De modo que la persona encontrará mejorías físicas, emocionales, mentales y espirituales.

He aquí la gran importancia del Reiki. Al ser Energía Universal y trabajar a nivel de vibraciones se convierte en una herramienta inteligente por si misma. No hace falta que le digamos qué debe hacer, pues él sanará por si mismo aquello que más dañado esté (del mismo modo que al echar agua en una balsa se llenan primero los agujeros más profundos). Por otro lado, al elevar nuestras vibraciones, va a hacer que todo nuestro cuerpo mejore de forma global y simultánea; evitando así posibles desequilibrios.

Pero sus beneficios van más allá. Si emocionalmente nos encontramos mejor, también será mejor nuestro humor y se reducirán los problemas físicos derivados del estrés u otros desequilibrios. Si a nivel mental estamos más tranquilos nuestras ideas fluirán mucho mejor, y nuestro cerebro podrá trabajar a mayor rendimiento. Espiritualmente, si elevamos nuestra vibración, también empezaremos a ser capaces de percibir cosas de las que antes no éramos conscientes.

Por último me gustaría profundizar en la pregunta de ¿Qué es el Reiki?, y sobretodo ¿Qué sentimiento expresa Reiki? Reiki es Amor. Reiki es una fuente de Amor infinito, que da y fluye siempre sin tener en cuenta lo que hayamos podido hacer de bueno o malo en la vida, una energía que es imposible de utilizar para el mal.

Y aún más lejos. ¿Por qué “hacemos” (en el sentido de iniciarnos en) Reiki? Muchos son los motivos que conducen a la gente hasta él, pero por lo general si uno llega por su propia voluntad lo hace con el ánimo de mejorar o porque cree que esto podrá ayudarle (a él o a otros) de algún modo. Luego, es Amor hacia uno mismo y por los demás lo que lleva a una persona a iniciarse en Reiki; porque se ama a si misma y desea mejorar o ayudarse.

Finalmente, ¿Cual es el sentimiento que asociamos a Dios (a la divinidad o a lo que percibamos en su lugar)? Amor, Dios es Amor. Luego, el sentimiento conector siempre es el Amor.

Espero que estas reflexiones hayan sido positivas para todos o hayan ayudado a comprender esta magnífica energía que llamamos Reiki.